Dejar de fumar en verano sin engordar

Parece una misión imposible, pero os aseguro que no lo es. ¿Cuántos de vosotros está pensando dejar de fumar antes, durante o después el verano?  Cada vez son más los que se plantean apagar el último cigarrillo para siempre, y afortunadamente muchos lo consiguen.

fumar1

Enhorabuena a todos los que lo hayáis logrado y doble enhorabuena si además no habéis ganado peso. ¡Si, dejar de fumar y engordar van cogidos de la mano!.

Varios de vosotros me habéis pedido consejo para perder los kilitos acumulados durante el proceso de deshabituación del tabaco.

Muchas veces se asocia dejar de fumar y ganar peso. Aunque os aseguro que no siempre es así. Dejar de fumar no engorda. Lo que engorda entre otras cosas, es comer más para aliviar la ansiedad del “no cigarrillo”.  Caramelos, bombones, atracones a la nevera, o comer un poco más porque la comida sabe mejor (o porque se tiene más hambre), son algunas de las respuestas que suelo encontrar cuando pregunto sobre el aumento de peso durante el proceso para dejar de fumar.

Si a  eso le añadimos los kilos extra que hayamos podido coger durante el verano (ya se sabe: los helados, las caipiriñas, horchatas, paellas, tapas y demás delicias gastronómicas que hayáis podido degustar en algún viaje en vacaciones), tendremos una razón de peso para ponernos manos a la obra, y perder los kilos acumulados y ponerse en forma. ¿Cómo?

Durante unas semanas, vuestra dieta debe ser muy ligera y frugal y es conveniente seguir un estilo de vida lo más saludable posible (por  muy retórico que parezca):

1.- Optad por las verduras, ensaladas, fruta fresca, pescado y carne a la plancha y evitad comidas grasas y pesadas.  De esta manera os será más fácil seguir evitando las ganas del cigarrillo de después de las comidas a la vez que facilitaréis la perdida de esos unos kilos extra ganados en verano.

ayurveda4

2.- A la hora de sentarse a la mesa para comer, evitad distracciones como la televisión para daros cuenta de lo que consumís, no poner en la mesa (o cerca de vuestro lugar en la mesa) ninguna fuente de comida para evitar volver a servirte más, utilizar platos más pequeños para que parezca que hay más comida en el plato (sí, también se come por la vista).

3.- Intentad beber agua antes de las comidas y aumentad su consumo a diario en general. Os aportará sensación de saciedad,  Os ayudará a eliminar toxinas y a encontraros mucho mejor. (¡Ojo! No confundir refrescos de naranja, cola o limón con agua. No son lo mismo).

agua 2

4.- En lugar del café después de comer, optad por el té verde. (Sin azúcar). Otras infusiones que os ayudarán a tener la ansiedad a raya pueden ser la manzanilla, valeriana, tila o las semillas de amapola.

4.- Haced ejercicio. Correr, nadar o practicar algún ejercicio aeróbico os ayudará a controlar la ansiedad, a mejorar vuestra capacidad pulmonar, a estar de mejor humor y a ganar salud y vitalidad!  Si no estáis habituados a hacer ejercicio, empezad de forma gradual con algunas rutinas sencillas, practicando yoga, Pilates o simplemente andando a un paso rápido o hasta bailando. La cuestión es moverse.

Pensad que los primeros días pueden volver a ser algo más difíciles. Sí, moderar el consumo de chucherías, azúcares y demás caprichos del verano pueden volver a producirnos algún momento de ansiedad (Esta vez mono por dejar de consumir azúcar blanco por ejemplo), aunque después de un par o tres de días, volveréis a la normalidad.

fumar2

¿Y vosotros? ¿Os habéis planteado dejar de fumar? ¿Estáis en pleno proceso de deshabituación del tabaco? O acaso sois exfumadores o no habéis fumado nunca? ¿O no tenéis pensado abandonar este hábito? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!

Besos desde mi blog!!!

También podéis seguirme a través de Facebook

Para más información: aecc –  DEJAR DE FUMAR –