Aprovechando que ayer (19 de noviembre) se celebró el día Internacional de hombre, vamos a dedicar este post al YOGA PARA HOMBRES.
Quizá pensaréis que este título es una tontería, ya que el yoga no tiene sexo, pero… os puedo asegurar que hace unos años, pocos hombres practicaban yoga, o por lo menos, se jactaban de decir públicamente que lo practicaban.
Los tiempos cambian y los que practicamos yoga desde hace muchos años podemos hablar de la evolución de los asistentes a las sesiones de yoga. Si antes podía afirmar que mayoritariamente en Occidente el yoga era “cosa de mujeres” y de personas mayores, poco a poco esta disciplina milenaria va ganando más y más adeptos dentro del público masculino (cosa que me parece fantástica!!!).
Originariamente y aquellos que habéis estado tomando clases en India, os habréis dado cuenta de que los grandes yoguis y gurús de yoga en la India son varones. Casi no hay yoguinis (mujeres que practiquen yoga). Solo recuerdo una de ellas, entre cientos de yoguis. Las mujeres hindúes se decantan más hacia el yoga devocional Bhakti yoga (yoga de los cánticos) ¿Conocéis a Amma?
En cambio y cuando volvemos a Occidente, los papeles se invierten ya que las clases de yoga suelen están llenas de mujeres, en parte debido a que todavía muchos hombres piensan que el yoga es demasiado lento o sencillo para ellos, sobretodo cuando hablamos de Hatha yoga. (Grave error por su parte!!! No es un yoga meditativo. Ni mucho menos)
Muchos de ellos suelen decantarse por deportes más intensos y activos como las artes marciales, atletismo, ciclismo, natación, levantamiento de peso, etcétera.
Pero poco a poco y gracias a la popularización de sus beneficios, las clases van llenándose de hombres, sobre todo en algunos estilos más activos y físicos del yoga como el Ashtanga Vinyasa o Bikram. Aunque y para ser honestos, estas disciplinas de «power yoga» son más comunes en América que en Europa. Tampoco es que me encanten estas nuevas disciplinas de yoga, ya que distorsionan los principios originales de la filosofía del yoga clásico, (ya hablaré de ello en otro post) pero mejor esto que nada.
La práctica habitual de cualquier variante de yoga ayuda a tonificar los músculos de una manera uniforme en todo el cuerpo (tanto a mujeres como a hombres indistintamente). Si le añadimos el trabajo respiratorio, mental y espiritual, el yoga puede ser un gran complemento al entrenamiento habitual, (aeróbico o anaeróbico), aportando múltiples beneficios para su salud, sin distinción de sexo!!
Una lectura interesante podría ser “YOGA PARA EJECUTIVOS”, (Profit Editorial) un libro en el que nos muestra cómo poner en practica determinadas asanas, en forma de tablas, para potenciar nuestro rendimiento en el trabajo y en la vida privada, y como no: ¡Utilizar el vehículo del yoga para disfrutar de una vida más completa y relajada!
¿Chicos? ¿Os animáis a apuntaros a una sesión de yoga? ¿O el yoga ya forma parte de vuestras rutinas de entrenamiento? Si habéis respondido afirmativamente, quizá os interesaría asistir a alguna de mis sesiones de yoga en Barcelona.
Besos desde mi blog!!!
